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Uso de lámpara UV-C en equipos de aire acondicionado
Para contribuir a la prevención de la contagio por el Covid19 entre otras enfermedades, el Ministerio de Vivienda ha dispuesto en 2020
la obligación de instalar en los equipos de aire acondicionado dispositivos emisores de rayos UV :
RESOLUCION MINISTERIAL N° 232-2020-VIVIENDA del 22 set 2020 que modifica la Norma del ministerio de vivienda: EM0.30
Instalaciones de Ventilación del Reglamento Nacional de Edificaciones
Art. 22.- Instalación de Emisores Ultravioleta de Banda C Se debe instalar Emisores Ultravioleta de Banda C que tengan una longitud de onda de 253,7
nanómetros y una densidad de radiación efectiva no menor a 30mJ/cm2 (30 mili Joules por centímetro cuadrado), en todo el serpentín de enfriamiento y
hacer uso de filtros en los sistemas de inyección de aire fresco con una eficiencia mínima MERV13, cuando en las edificaciones se incluyan instalaciones de
aire acondicionado.
La luz ultravioleta de longitud de onda entre 200 y 280 nm, denominada comúnmente cómo UV de onda corta (UV-C) tiene la mejor función germicida para desactivar microbios,virus y hongos. En general, las lámparas UV-C se instalan en el interior de las unidades de tratamiento de aire y frente a los serpentines de refrigeración, por ser éste el lugar de mayor humedad donde pueden proliferar con facilidad los microorganismos nocivos. La utilización del sistema germicida de radiación de Luz Ultravioleta es complementaria a las etapas de filtrado de alta eficiencia, en todo caso necesita de éstas para rendir en su máxima eficiencia.
Importancia del mantenimiento preventivo del sistema de aire acondicionado
Los equipos de aire acondicionado pueden funcionar muchos años si operan en condiciones óptimas. Para evitar acortar su vida útil , es
necesario darles mantenimiento periódico, mínimo cada 6 meses si funcionan todo el año o cada año si el uso es solamente en periodos
de calor. El mantenimiento consiste entre otras cosas en la limpieza de los filtros de la unidad interior (split fancoil), la limpieza del
condensador exterior y la bobina que en general se ensucian mucho por el polvo. Se verifica y se corrige también el nivel de gas y el
engrasado del motor. Si falta el gas refrigerante, se verifica si hay una fuga en los ductos. El mantenimiento preventivo permite
verificar el funcionamiento y el estado de todas las partes del sistema, y prever el reemplazo de las piezas defectuosas.
Se precisa que cuando los equipos están sucios, los motores se esfuerzan más y el consumo eléctrico se incrementa, por lo cual el mantenimiento preventivo es benéfico también para mejorar esto. Es imprescindible que el mantenimiento se realice con personal técnico calificado ya que existen riesgos de daño a la salud por electrocución o contacto con el gas refrigerante entre otras cosas, además que los equipos pueden ser deteriorados si son manipulados por persona sin los conocimientos adecuados.